Lo poco y lo mucho que tiene que cambiar La Roja de Don Vicente


 


Vicente Del Bosque es un hombre con sensibilidad política y una buena memoria.

Sabe que la mayoría de los españoles no ven al futbol como la solución a su crisis, pero si miran hacia él y su selección- con su colaboración de catalanes, vascos, y otros españoles, como una inspiración que contrasta con la intolerancia, división, y fallos institucionales y de liderazgos que la ciudadanía tiene que sufrir.

Sabe el largo y difícil camino que llevo a que España por fin fuese respetada como Campeón Europea (2008 y 2012) y Campeón Mundial (2010) y como esto se logró gracias a una generación de jugadores talentosos dispuestos a juntarse en un gran proyecto- o sea una definida filosofía de solidaridad de equipo y practica de futbol, todo un ejemplo de conducta humana y creación.  

Pero el futbol también tiene que ver con la suerte, con la energía de cada uno, con la táctica individual y en conjunto, incluyendo la capacidad de reforzar la defensa y la capacidad goleadora una vez identificados fallos internos y la amenaza menos pensada del rival.

Fue evidente que desde el primer minuto de la final de la Copa de Las Confederaciones, La Roja no era La Roja en la cual creemos sino un desordenado equipo en el cual casi cada jugador jugaba su peor partido, y que Del Bosque no tenia nada que hacer- o sea un paciente futbolero en la sala de urgencias, sin aparente remedio, ni capacidad de reacción.

 Cualquier equipo puede ganar o perder un partido pero Brasil gano porque jugo mejor. Nada más terminar el partido, Del Bosque no busco  escusas, pero si apelo a la sensatez, recordando lo que no debíamos olvidar fácilmente, la alegría que ha supuesto La Roja a lo largo del camino atravesado.

Del Bosque sabe mejor que nadie que habrá que tomar decisiones difíciles en los próximos meses, con jugadores como Villa, Arbeloa, Casillas, y Torres enfrentándose con un futuro incierto no como jugadores de Alemania, y ahora Italia y Brasil que ya ven creciendo su potencial y auto-estima.   

Pero el reto es manejable. España aun cuanta con una fuente incomparable a nivel mundial de talento futbolero. El primer equipo de ahora tiene un pro-medio de edad esperanzador, y jugadores de gran talla como Xavi Hernández, Iniesta, Jordi Alba, Ramos, Javi Martínez, Busquets, Pedro, Cazorla, Mata , Cesc Pique y Navas que tienen aún mucho para ofrecer con tal que club y selección se pongan de acuerdo para no liquidarles físicamente.

Y luego están los jóvenes del sub-21, liderados por Isco y Thiago Alcantara y con otros talentos como Morata, Tello, De Gea, y Muniain que hicieron grandes cosas en la recién Eurocopa en Israel pero no estuvieron estos últimos días  en Brasil y que están  ya listos para la promoción.

El futbol creativo de control, posesión, y toque, de movimiento fluido, rápido y efectivo no es cosa del pasado. Pero para seguir contando con nuestro respeto La Roja tiene que asumir mejor flexibilidad táctica, y asegurase que en los grandes partidos pueda contar con jugadores con la motivación y energía necesaria. Al mismo tiempo hay que cuidar egos y saber cuándo suprimirlos cuando esto se vuelva en contra del buen común del equipo.Ojo Ramos.

Del Bosque tiene la sabiduría, y lo ha demostrado en el pasado para saber dónde las cosas están mejor sin tocar, y donde es necesario un cambio.  Confió que será su sabiduría la que le ayude a escoger bien en los meses que vienen los jugadores y la táctica que pueda llevar a que  La Roja se sienta reforzada y dispuesta a defender, su corona, con un gran futbol, como los buenos tiempos. El Domingo la derrota me sembro mas dudas que esperanzas.Pero no he perdido la fe en Don Vicente,  ni en que La Roja retome su camino, y siga en proceso de evolución.

 

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